La potencia que tienes contratada repercute de forma directa en tu factura de la luz por lo que, sin duda, se trata de una cuestión que conviene tener muy en cuenta. Debes de ajustar la potencia a tus necesidades reales. En esta entrada, explicaremos cómo se calcula la potencia que se cobra en tu factura.
¿Cómo se factura la potencia?
En línea con nuestro compromiso con la transparencia y para que nuestros clientes puedan comprobar que pagan sólo por lo que necesitan, a continuación explicamos las claves que determinan la potencia a facturar según el controlador de potencia de la instalación.
En suministros sin controlador de potencia por maxímetro (2.0A, 2.0DHA, 2.1A y 2.1DHA), se facturará la potencia contratada.
En suministros con controlador de potencia por maxímetro (3.0A y 3.1A), se facturará según la potencia máxima alcanzada en el período de facturación. De este modo podrás saber de un modo más rápido y sencillo si la potencia contratada es la que más se ajusta a tus necesidades, pudiendo detectar cualquier desequilibrio de un vistazo:
- Si en el período de facturación no alcanzas el 85% de la potencia contratada, te facturan únicamente el 85% de la misma.
- Si consumes entre el 85% y el 105% de la potencia contratada te facturan la potencia que marque el maxímetro.
- Si la potencia maxímetro supera el 105% de la potencia contratada se facturará con penalización: la fórmula es el doble de la diferencia entre la potencia maxímetro menos el 105% de la potencia contratada más la potencia maxímetro. (PM – 105% PC) x 2 + PM.
Conoce si la potencia que tienes contratada en tu tarifa de luz esta optimizada ¡Llámanos y sin ningún compromiso te realizaremos un estudio!